Las contraseñas se convirtieron en las llaves virtuales que nos dan la posibilidad de acceder a toda la información sensible que guardamos como por ejemplo, el contenido del correo electrónico o nuestra información bancaria. Ahora bien, ¿cómo sabemos si la combinación elegida es una clave segura?
En primer lugar, cabe mencionar que cuando nos referimos a una clave segura, hablamos más allá de la extensión de la misma; apuntamos a la indescifrabilidad y robustez que ofrece para que tus datos estén fuera del alcance de otras personas y softwares maliciosos.

Sabías que un atacante con una computadora común puede descifrar una contraseña no segura de ocho caracteres en pocos minutos...?

A continuación, te vamos a facilitar algunos consejos prácticos con los cuales vas a poder generar mejores claves.

Cómo es una clave segura
Si la contraseña puede ser alfanumérica, tené en consideración las siguientes recomendaciones:

• Utilizá tantos caracteres como sea posible: Asegurate de que tu clave tenga la extensión máxima permitida. Todo depende de vos y de qué tan buena sea tu memoria.
• Evitá los patrones y/o datos personales: Nunca uses letras y números como por ejemplo abcde, asdfg, 12345. Tampoco ingreses nombres propios, direcciones ni fechas de cumpleaños.
• Ingresá varios tipos de caracteres: Combiná letras, números y caracteres especiales (punto, numeral, comillas, etc). En cualquier caso, el orden de los componentes de la contraseña los elegís vos.

Si la clave que te solicitan es numérica, como en el caso de Banco del Sol, tené en cuenta lo siguiente:

• Nunca uses secuencias numéricas como 123456.
• Evitá utilizar datos filiatorios o personales, como por ejemplo fechas de nacimiento, aniversario, patente de auto, número de domicilio, etc.
• Combiná distintos números, intentando no repetirlos.

Consejos prácticos para generar una contraseña

La estructura es solo el primer paso para crear tu clave segura. Ahora, tenés que pensar qué caracteres utilizar, y para eso también te compartimos algunas sugerencias:

• Cambiá la clave de forma regular: Si estás utilizando la clave para ingresar a un lugar donde no se utiliza doble factor de autenticación, modificala una vez por mes o una vez cada noventa días.
• No compartas tus contraseñas con nadie: Evitá escribirlas o guardarlas en archivos de texto.
• Nunca permitas que los navegadores recuerden tus contraseñas: Sabemos que esto puede resultar muy útil pero la realidad es que los navegadores guardan esas claves en una lista de texto y, algunos de ellos, ni siquiera la tienen cifrada.
   

Ejemplos de claves seguras

Te dejamos algunos consejos prácticos para crear una contraseña fuerte, sólida y que sea fácil de recordar.

Creala a partir de una frase
Pensá en una frase que tenga algún significado para vos. Ahora, seleccioná la primera letra de cada palabra respetando mayúsculas, minúsculas y agregá algún carácter especial.

Evitá las vocales o reemplazalas por números
El reemplazo de vocales por números en una palabra común, es una práctica muy conocida por los ciberdelincuentes. Por eso, te sugerimos utilizar dos o tres palabras juntas para así poder eliminar las vocales o, sino, reemplazarlas por números o símbolos.

Mezclá palabras con números
Intercalá un número dentro de una palabra.

Te aconsejamos cumplir con estas sugerencias al pie de la letra para poder así crear contraseñas seguras. Actualmente, contamos con muchas herramientas al alcance de nuestra mano para poder cuidar nuestros datos e información y prevenir robos, fraudes o estafas, aprovechalas